El informe del FMI también señala que los aumentos de precios continuarán elevados en todo el continente. Los banqueros de América latina sintetizan la situación actual: llevar la inflación de regreso a sus objetivos será una batalla larga y complicada.
¿Quién va a crecer más en América?
Aunque la región enfrenta importantes desafíos, el FMI destacó que Latinoamérica se ha mostrado "muy resiliente" a los retos de los últimos años. En el caso del empleo, ya se observan niveles superiores a los registrados antes de la pandemia.
El informe también proporciona detalles sobre las previsiones para las principales economías de la región. México, por ejemplo, se prevé que crezca un 1,8% en 2023, después de haber registrado un aumento del 3,1% en su PIB en 2022. La cifra se moderará aún más en 2024, hasta el 1,6%, mientras que la inflación pasará de un 6,3% este año a un 3,9% el próximo.
Chile, por su parte, es el único país latinoamericano que entrará en recesión, según las cifras del FMI, que proyecta una pérdida del 1% del PIB este año. El país se recuperará en 2024 y crecerá un 1,9%, mientras que la inflación se situará en el 4%, después de haberse reducido al 7,9% este año.
Colombia experimentará un crecimiento muy moderado del 1% en 2023 y del 1,9% en 2024. La inflación crecerá este año, hasta el 10,9%, pero se moderará hasta el 5,2% el próximo año.
Brasil, uno de los primeros países que comenzó a subir los tipos de interés para frenar la espiral inflacionaria, verá su PIB crecer apenas un 0,9% este año, mientras que la inflación se reducirá hasta el 5%. Para 2024, el país crecerá un 1,5% y mantendrá la inflación en el 4,8%.
En cuanto a Centroamérica y el Caribe, el FMI prevé un crecimiento del 3,8% en ambos años, con una inflación que se reducirá progresivamente hasta el 5,5% este año y el 4% el próximo en Centroamérica, mientras que en el Caribe, se espera que el PIB suba un 9,9% este año con una inflación del 13,5%, y un aumento del 14,1% en 2024, ya con una inflación más moderada.
En marzo, Brasil y México registraron una tasa de inflación mensual del 0,7% y 0,2%, respectivamente, con una tasa de inflación interanual del 4,6% y 6,8%. Ecuador, el país que adoptó la dolarización hace dos décadas, mostró la tasa de inflación más baja de 0,06% en marzo, y el FMI proyecta que sea del 2,5% para diciembre. El problema de la tasa de inflación es el resultado de un error de política, y los gobiernos deben tomar medidas inmediatas para controlarlo. Necesitan reducir el gasto público, atraer inversión extranjera y desarrollar una economía sólida con un bajo déficit presupuestario para llevar la economía de vuelta al camino correcto.
¿Quién está peor con la inflación ?
Especialmente a Argentina y Venezuela, donde se espera que la inflación supere el 98% y el 400%, respectivamente, para 2023. Esto se debe en parte a la disminución del impulso que dio el aumento de los precios de las materias primas en 2022, lo que afectará negativamente el crecimiento de la región este año.
Ver aquí un informe completo de la Inflación en Argentina.
Los Banqueros muchos más cautos que el FMI
Los banqueros centrales regionales de América Latina están intensificando su lucha contra la inflación, a pesar de las críticas de algunos líderes políticos. Después de tomar la iniciativa a nivel mundial al aumentar las tasas de interés tras la pandemia, los responsables de formular políticas monetarias han advertido a los inversores que la lucha contra la inflación tomará más tiempo de lo esperado. Durante las reuniones de primavera del FMI, funcionarios de los bancos centrales de Brasil y Chile destacaron que necesitan más evidencia de que las presiones sobre los precios se están aplicando antes de relajar sus políticas.
El presidente del banco central de Perú, Julio Velarde, fue claro en señalar que bajar las tasas para volver a subirlas dos o tres meses después es el peor escenario para un banquero central. Durante las reuniones en Washington, los líderes económicos de la región enfriaron las esperanzas de un fin inminente de la política monetaria restrictiva, y su mensaje a las economías desarrolladas fue que llevar la inflación de regreso a sus objetivos será una batalla larga y complicada. Como tip, se recomienda a los inversores seguir de cerca la evolución de las políticas monetarias y estar preparados para un período prolongado de lucha contra la inflación.